lunes, 17 de marzo de 2008

Capitulo 04 - Okupación Malva

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(pasos, y música de misterio...)


Mortimer: puf, sobrecogedor, una perrera sin barrotes...
Christopher: ¿Septiembre?
Septiembre: un plano de cuatro lineas, no se papá, me faltan paredes. Intentare acostumbrarme, y si no, las levantaré.
C: ¿Walt?
Walter: no quiero emitir una opinion, y mucho menos que esta cuente.
C: ¿Eterna?
Eterna: No se, tiene algo extraño, algo extraño pero atractivo. Quizás es su frialdad, la hostilidad que transpira. Creo que es practicamente imposible echar raices en este lugar. Es imposible acomodarse. Me gusta, Christopher, me gusta mucho. Por mí nos quedamos.
Mortimer: Oye, Christopher, ¿que diablos era esto antes?
C: era un empresa de trabajo temporal que se hundió por el preso de su propio dueño. Un señor muy gordo que murio devorado por sí mismo en un ataque de codicia.
E: ¿por eso está medio hundida en la tierra?
C: Creo que sí.
M: A mi esto de que la casa este medio enterrada me gusta, me siento, me siento mas cerca de los gusanos que pronto me han de devorar. ¿Cual es mi habitación?
S: Abuelo, esta casa no tiene muros, es una nave, un loft, no tiene habitaciones. Mira, es un plano de cuatro líneas, es solo eso.
M: Bueno bueno, nenita ya esta bien eh, voy a buscar un gato.
E: ¿Un gato papá? ¿Para que quieres un gato?
M: Uy, los gatos siempre buscan el calor en invierno y el fresco en verano. Mi habitacion será donde este el gato. Seré un nómada en mi hogar. Además tengo alergia. Con un poco de suerte esa maldita bola de pelo acabará conmigo. Vuelvo enseguida.
S: Espera abuelo, voy contigo.
C: Eterna, mi amor, entonces, ¿nos quedamos con la casa?
W: no quiero emitir ninguna opinion, y mucho menos que esta cuente.
E: Yo creo que sí, Chris mi amor. Nos quedamos.. A mi me gustaba el puente, pero podemos probar aqui. Y si no estamos bien nos buscamos otra.
C: ¿Te he dicho alguna vez que me pones terriblemente cuando estas tan resuelta?
W: (mientras sus padres estan al tema): podeis hacer el amor delante de mí, no me importa. He decidido no inmutarme por nada que ocurra ante de mis ojos. Decisión que me vendra de perlas en esta nueva casa sin muros...(gimen)... Voy a buscar al abuelo.

(cambio de escena, estamos en el exterior)
Mortimer: Anda la policía, escondete pequeña.
S: Abuelo, si es Walter. Además, ¿porque tendria que esconderme de la policia?
M: Ay, Septiembre, para poder vivir en paz hay que infringir las normas, y la policia busca y detiene a quien las infringe.
S: Pero, vivir perseguido por la policia no es vivir en paz.
M: Claro que sí nenita. Es vivir en paz con uno mismo y con sus principios. No hay mayor paz que la de ser coherente con lo que uno piensa hasta las ultimas consecuencias. Lo de la policia es un detalle a tener en cuenta, pero no llega a perturbar la paz. Y si uno está atento, no trunca la libertad.
S: Vaya, que interesante ¿puedes repetirlo para que lo apunte?
M: Pues no, esto son cosas de tu madre, que yo repito como un loro, pero que ni las entiendo ni me interesa, vaya.
W: Un rato más.
S: Un rato más, Walter.
W: ¿Qué haceis?
M: Perder el tiempo. Y a mi no es que me sobre. Cualquier dia, cualquier dia la espicho desintencionadamente. Bueno bueno, basta de coloquios, yo me voy.
S: Abuelo espera. Dime antes que normas infringimos.
M: Ay esta bien, bueno bueno. Para empezar, vamos a vivir en un espacio que no nos pertenece oficialmente. Está abandonado y vacio desde hace años. Pero se supone que tiene un dueño y que es "ilegal" meterse en el asi por las buenas.
W: Entonces ¿somos Okupas?
M: Pues claro que lo somos, pero no se lo digais a vuestro padre.
S: Abuelo abuelo, ¿porque quemaste la casa?
M: Oy, lo que yo me pregunto es porque los malditos bomberos no me dejaron arder con ella. ¿Lo veis? ¿Lo estais viendo? Los cuerpos del estado siempre frustrando al ciudadano.
W: ¿Tu siempre habias vivido en esa casa?
M: Sisi si
S: ¿Desde cuando?
M: Desde siempre.
S: ¿Cuando es siempre?
W: ¿Cuantos años tienes abuelo?
S: ¿Tienes madre?
M: Basta basta basta de preguntas, demonios. Psss minino.
S: ¡Responde abuelo!
M: Callate bruja. He venido aqui a buscar un gato, no a que me desnudeis el alma.
S: ¿Qué hacemos?
W: No sé, creo que voy a la casa nueva a tirarme al suelo.
S: ¿Como papá?
W: A el le funciona...
S: Yo me voy a buscar al gato...

(cambio de escena)
Eterna: Walter ¿que haces tirado en el suelo?
Walter: Mama, ¿somos okupas?
E: ¿Y quien no lo es?
W: Eso es infringir las normas no?
E:
W: ¿Y eso es malo?
E: Eso está perseguido y castigado por la ley.
W: ¿Y porque lo hacemos?
E: Walter, no es la primera vez que hablamos de esto. Sencillamente hay normas con las que yo no estoy de acuerdo, y no las voy a cumplir. No quiero la propiedad de este espacio. No pienso endeudarme por un suelo.
W: Pero ¿que pasaria si todo el mundo hiciera lo mismo? ¿Y si nadie comprara sus casas? ¿Y si todo el mundo empezara a okupar casas vacías?
E: Si eso sucediera, probablemente empezarian a desaparecer ciertas normas. De todas formas, quiero que te quede claro que esta es una decision mia. Tu no tienes por que estar de acuerdo. Y si tu no quieres vivir de este modo, lo comprendere.
W: Pero, no se...
E: Y lo respetaré.
W: Aun soy joven, no voy a tomar ninguna decisión.
E: Me parece bien.
Mortimer: Vaya, nada de nada, nada de nada, ni un maldito gato. A ver ahora donde voy a dormir yo. Era más feliz siendo un perro bajo el puente.
E: Un rato más papá.
M: Un rato más hija.
E: ¿Donde esta Septiembre?
M: Y yo que sé (suena un sonido de fricción). Se vino hace un rato. Intenté convencerla de que maullará, y se enfadó. Es una niña muy rara, Eterna. Deberías encerrarla.
E: ¿Walter que haces?
W: no, no, no, nada, nada.
E: ¿Quieres hacer un agujuero en el suelo?
W: No se, no, no lo se que me ha pasado.
E: Te vas a destrozar los dedos como sigas arañando el cemento.
W: Bien bien, mamá, ya está.
M: Oye Eterna este hijo tuyo es muy raro.
E: Walter, deja de cavar, y date una vuelta a ver si encuentras a tu hermana.

Christopher: Eterna, cariño, ¿entonces, definitivamente, nos quedamos?
E: Sí, bueno, me preocupan los chicos Christopher. No quiero que se acomoden en la vida ni en esta casa. Pero tampoco quiero que se vuelvan locos por no ubicarse. Llevan toda la tarde excarvando en el suelo y las paredes.
Mortimer: Bueno quizás esten buscando muertos.
Christopher: ¿Pero qué muertos? No digas bobadas, aqui no hay ningun muerto.
M: ¿Pero no dijiste que esto era una antigua empresa de trabajo temporal?
C: Si...
M: Pues eso, en estos lugares se amontonan los cadaveres. Los empleados están muertos .Los que requieren sus servicios están muertos. Sus dueños están muertos. Vivimos en un cementerio queridos míos.
Christopher: Mortimer, yo trabajé una vez para una de estas ETT's.
M: Ya. Te lo dije Eterna, estas casada con un muerto. Un ser debil, capaz de vender su alma al diablo por mil pesetas la hora.
E: ¿Podeis arrancaros la lengua y prestar un poco de atencion a lo que os digo? (suena otra vez la fricción) Septiembre desapareció hace dos horas por un tunel que cavó con sus propias manos. Y Walter está a punto de hacerlo por otro distinto. ¿No vais a decir nada? ¿Que os pasa? ¿Christopher, Papa? ¿Donde estais? ¿Donde demonios os habeis metido?

E: Septiemre Malva, sal inmediatamente de tu agujero y ven aqui ahora mismo.
S: Si, mamá
E: Walter Malva
W: Voy, mami.
E: Mortimer Malva
M: No, no quiero salir, estais todos locos. ¡Tengo miedo!
E: ¡Papá!
M: Voy, voy, ya voy hijita querida.
E: Christopher Lambert...
C: Ya salgo amor.
E: ¿Alguno de vosotros puede explicarme porque de repente mi familia se ha convertido en una banda de topos?
M: Jeje, es la atraccion por la muerte, por los gusanos, la busqueda del minino...
C: Es, la casa, Eterna. Es el suelo en el que estamos medio enterrados, que nos llama.
W: Es una fuerza inexplicable mamá, es la tierra que nos susurra dentro del oido que nos adentremos en ella¿Tu no lo oyes?
S: Es eso mamá, una llamada. Debemos seguirla y adentrarnos. Debemos construir las dependencias de la casa hacia dentro. Hacia el centro de la Tierra. Debemos vivir enterrados. Es una señal. Ha de ser así, mama.
E: Está bien ¿Estais todos de acuerdo?
Todos asienten.
E: Bien, si así lo quereis. Viviremos enterrados. Al fin y al cabo, es nuestro sino.

lunes, 10 de marzo de 2008

Capítulo 03 - La secta del perro

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Septiembre: Walter Malva, ¿has aprovechado todas y cada una de las partículas de vida que se te otorgaron al nacer?
Walter: Si, maestra, las aproveche.
S: ¿Estás dispuesto a reírte de la muerte como lo has hecho de la vida?
W: Si maestra, estoy dispuesto.
S: ¿Estás preparado para caminar por el túnel luminoso hacia el mas allá?
W: Lo estoy maestra.
S: Querido compañero Walter, ahora yo te digo que hagas lo que tengas que hacer. Lánzate y se libre.
W: Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!
S: Aquí yace Walter Malva, asumió su paso inútil por el mundo, saboreo su imperfección y se regodeo en ella; probablemente en el otro lado tampoco se lavará las manos antes de comer y a nadie le importara; que su espíritu deambule por el mundo de los muertos y que no descanse jamás. Suéltate Walter, desata la cuerda y sube, ahora me toca a mí.
W: ¡No, aun no! Me has hecho un epitafio muy corto.
S: Considero que ha sido breve pero directo, atrevido, enjundioso y definitivamente indiscreto.
W: Quiero oír algo mas explicativo, más desarrollado.
S: Si Walter, pero primero me lanzo yo y luego te hago un funeral completo si quieres.
W: De acuerdo…

(Ladridos)
Christopher: Tu padre esta ladrando cariño.
Eterna: Ya lo oigo Christopher.
C: Se comporta como un perro.
E: Si se comporta como un perro es porque debe de sentirte así. Papa es una persona muy transparente.
C: Transparencia… menos mal, yo pensé que tendría demencia senil. Debo de ser un extravagante.
E: Papa, ¿cómo es que ahora ladras?
M: Estoy recuperando mi capacidad de jugar con la vida, los instintos, haber perdido nuestra casa y vivir bajo este puente me han hecho recuperar mis viejos sentidos de perro rastreador.
C: ¿Así que es tu nuevo karma de perro el que te da esta libertad para corretear medio desnudo y orinar en cualquier lado con tanta paz?
M: Dulce, dulce felicidad y vida tranquila la del perro. Siempre al sol, siempre despreocupado.
E: Rápido, ¡un pato se acerca! Shhhhh, no hagas ruido papa. Christopher, ayúdame con el pato, a la de tres saltamos. Una… dos… ¡tres!
E: Casi, adiós pato a la naranja para la cena.
C: Así no se hacen las cosas familia. ¡No, no y no!


W: Septiembre Malva, ¿has aprovechado todas y cada una de las partículas de vida que se te otorgaron al nacer?
S: Si maestro, las aproveche.
W: ¿Estas dispuesta a reírte de la muerte como lo has hecho de la vida?
S: Si maestro, estoy dispuesta.
W: ¿Estas preparada para caminar por el túnel luminoso hacia el mas allá?
S: Lo estoy, maestro.
W: Querida compañera Septiembre, ahora yo te digo que hagas lo que tengas que hacer. Lánzate y se libre.
S: Ahhhhhhhhhhhhhh!!!
W: Hermanos, nos hemos reunido hoy aquí para despedir a nuestra querida hermana Septiembre. Antes de dejarnos, Septiembre nos obsequio con un maravilloso ejemplo de libertad que ha de ser seguido por todos…
C: ¡Basta! ¿Qué clase de juego macabro es este? Venid aquí ahora mismo, Walter y Septiembre. No estoy dispuesto a seguir tolerando que mis hijos jueguen a hacer puenting, a imaginar que mueren y a escribirse epitafios. ¡Tampoco a que mi suegro de noventa años ladre ni a que mi mujer cace patos para la cena! Estoy preocupado, muy muy preocupado por vosotros y el futuro, familia.
E: ¿No crees que tienes una pasmosa facilidad para sacar las cosas de quicio, Christopher?
C: ¿Es natural que alguien quiera tener la felicidad estúpida de los perros? ¿Y que quiera vivir debajo de un puente?
M: No, no, no lo has entendido.
C: ¡¿Qué no he entendido?!
M: No es que queramos vivir debajo de un puente, es que se nos quemo la casa. Y vivimos debajo de un puente. Christopher es mucho más sencillo mi planteamiento que el tuyo.
C: Esto no es natural, Mortimer, ¡no lo veo natural!
E: ¿Y qué es lo natural?
C: Que cogieseis el periódico y que me ayudaseis a buscar un nuevo hogar para los Malva. Eso es natural.
E: ¿Qué más?
C: Que estuvieseis preocupados, que os disgustara esta situación, que sufrierais.
E: ¿Es eso lo natural, Christopher?
C: Si.
E: ¿Sufrir como tú lo haces?
C: Si.
E: Querido yo estoy feliz por haber salvado del incendio una cosilla de aquí, otra de allá, por cambiar de aires, pero tu…
C: Cuanta frivolidad la tuya, Eterna. Tu padre quemo la casa, vivimos debajo de un puente y solo pensáis en ladrar, en cazar, en pescar…
E: Básicamente nos guiamos por el hambre y el resto de nuestros instintos primarios, Christopher.
C: La bandeja de filetes de pechuga de pato en el Carrefour cuesta 5’87 euros querida, va precintada, con sello de garantía y lleva fecha de caducidad. No sé porque tenéis que hacerle asco solo porque vivamos debajo de un puente.
E: No te voy a negar que en otros momentos de mi vida me haya apetecido vivir como una señorona, pero no ahora marido, ahora me apetece… vivir al fresco.
C: ¿Al fresco?
E: Así, desnuda, desprotegida, descivilizada…
C: ¿Y donde esta vuestro sentido de la propiedad?
M: Ains… Sabes perfectamente que los de nuestra especie no conseguimos jamás desarrollar fuertes avenencias por casi nada.
C: ¿Sois incapaces de sentir apego por nada? ¿De amar un libro que se os regaló, un sofá que heredasteis de los abuelos, un olor que os recuerda a alguien?
M: Eterna, no puedo más… Te dije que no te casaras con el…
C: Trabajar para vivir, ahorrar para tener, guardar para encontrar. ¿Adónde queda todo eso?
E: Es sencillamente monótono, ¿Por qué te empeñas en quitarle sal a la vida?
C: ¡Quiero azúcar!
M: Eres incorregible. Veinte años así...
C: ¡Azúcar! ¡Quiero azúcar!
E: ¡Ahh! ¿Pero se puede saber que estás haciendo?
C: ¡Quiero un huevo frito!
E: ¡Estás loco! ¿Te quieres levantar del suelo, Christopher?
C: ¡No! ¿Es que acaso soy el único miembro de esta familia a quien le está prohibido hacer disparates?
E: No, Christopher, pero eres el único que los hace por desesperación.
C: ¡Quiero un huevo frito y lo quiero ya!


Septiembre y Walter: ¡Un rato mas familia!
E: Hola niños.
W: ¿Ya esta papa pidiendo huevos fritos?
C: ¿Qué hago aquí? ¿Cuál es mi lugar en el mundo? ¿Dónde está mi sofá? ¡Que me sirvan un huevo frito ya!
S: Papa, ¿te animas a lanzarte puente abajo y a escuchar tu epitafio mientras te balanceas como un péndulo? Seguro que eso te relaja.
C: Un huevo frito, quiero un huevo frito…
Tele: ¡Eh! ¡¡¡Pppsssstt!!! ¡Eh!
S: ¿Qué?
T: Perdonen mi intrusión…
S: ¿Qué? ¿Qué pasa? ¿Qué mira? ¿Le gustan los espectáculos? ¿La carnaza?
T: Me siento inevitablemente atraída hacia ellos…
E: ¡Pero si es una tele!
T: Efectivamente. He observado que todos ustedes tienen una conducta bastante poco habitual. ¿Forman parte de alguna secta?
S: ¿Secta?
T: Si, ya sabe: comunidad con actividades estrafalarias y objetivos destructivos de esos que suelen gustar a cualquiera.
S: Si así fuera, habrá usted notado que el señor que está tirado en el suelo pidiendo un huevo frito pertenecería a una secta distinta a la nuestra.
C: Quiero un huevo frito…
T: Por tanto tendríamos dos sectas: la del huevo frito y otra encabezada por el viejo ese que ladra, la secta del perro.
E: Me gusta
S: Sintetiza y resuelve con rapidez y facilidad. Se parece a mí.
W: ¿Nos quiere llevar a un programa de esos para que montemos un espectáculo raro para todo el país?
T: No, ya no ejerzo, soy una tele que ya no trabaja como tele.
W: ¿Y de que ejerce?
E: Vivo para mí misma bajo este puente.
M: Una tele vagabunda.
W: Una tele sin salón.
S: Una tele por sí misma.
Todos (Menos Christopher): ¡Adopción! ¡Adopción! ¡Adopción! ¡Adopción!
Christopher: ¡Basta! Adoptamos a la tele…